Sinfónica del Conservatorio tiene espíritu formativo: Germán Tort

México, 13 Dic (Notimex).- El programa de fin de año que la Orquesta Sinfónica del Conservatorio Nacional de Música (OSCNM) interpretará hoy en el Auditorio Silvestre Revueltas es parte del repertorio que todo joven instrumentista tiene que aprender para cuando llegue a una agrupación profesional, "porque somos una orquesta formativa”, aseguró su director, Germán Tort. Por ello, esta noche la agrupación interpretará “Obertura Coriolano”, de Ludwig van Beethoven, “Concierto para piano núm. 21” y ”Concierto para clarinete”, de Wolfgang Amadeus Mozart, así como “Sinfonía inconclusa”, de Franz Schubert. “El programa de fin de año de la Orquesta Sinfónica del Conservatorio Nacional de Música (OSCNM) es parte del repertorio que todo joven instrumentista tiene que aprender para cuando llegue a una agrupación profesional, porque somos una orquesta formativa”, expresó Tort en declaraciones difundidas por el Instituto Nacional de Bellas Artes (INBA). El director de orquesta consideró que se trata de obras básicas, formativas para los jóvenes músicos. El proceso de selección de los solistas del concierto (el pianista Isaí García y el clarinetista Juan Mendoza) fue por medio de un concurso de entre unos 17 alumnos. “Todos ellos tocaron y fueron seleccionados quienes hicieron más musical las obras, tocaron más limpio y tenían mayor conocimiento de las piezas. Quienes cumplieron los requisitos fueron los solistas ganadores, seleccionados por un jurado compuesto por cinco maestros de diferentes instrumentos y por mí”, explicó. Reiteró que la OSCNM es una orquesta formativa, “siempre interpretamos obras básicas para darle oportunidad a los alumnos de participar como solistas porque es el momento y el lugar para que practiquen con la orquesta y después hagan su vida profesional”. Indicó que en la formación de estos jóvenes participa un equipo de maestros que deciden en conjunto qué repertorio poner con base en los que los alumnos necesitan y cómo se lo pueden dar para que lo apliquen en una orquesta profesional. “Ayudarles a los estudiantes a crecer es una de las satisfacciones más grandes que puede haber; es hacer esa labor que necesita México. No se puede ser músico nada más: se necesita ser educador y músico a la vez. Para mí es tan satisfactorio dirigir una orquesta profesional como una orquesta de jóvenes formativa”, concluyó Germán Tort.