Cultura

Jun 04, 2015 14:34:01       194        0

Llegará la Vela Muxe Guuchachi al Distrito Federal

México, 4 Jun (Notimex).- El colorido, la alegría y el simbolismo de las velas istmeñas llegarán a la capital del país con la tercera edición de la Vela Muxe Guuchachi, una de las tradiciones con más arraigo en el estado de Oaxaca, que se realizará en el Salón Ícaro, en esta capital. Los organizadores informaron que este festejo multicultural e incluyente será protagonizado por la coronación de Felicia Garza como reina del evento, además habrá pasarela de trajes regionales, música en vivo, comida típica de Oaxaca y la bebida más tradicional de ese estado, el mezcal. Las Velas son fiestas nocturnas donde se bebe, come, baila y se atiende con fervor a los invitados, estos festejos tienen orígenes prehispánicos. En los últimos 40 años, las velas que se celebran en Juchitán, Oaxaca, ofrecen un atractivo adicional: la entrega festiva y alegre de la comunidad muxe, que conjuga el orgullo de la homosexualidad, la creatividad, el servicio a los demás, el trabajo comunitario y el regocijo por la vida. En todas las Velas de Juchitán y sus alrededores es posible apreciar el colorido y la majestuosidad de la creatividad muxe, desde los vestidos, la joyería y arreglos que lucen las mujeres, hasta los adornos de las calles y los carros alegóricos. Fray Diego de Durán (1537-1588) escribió acerca de las velas: “celebraban la venida del agua (Atemostli), el descendimiento del agua del cielo, se ofrecían comidas particulares de masa y legumbres, se flagelaban en honor del Dios de la lluvia. “Había este día (en diciembre del calendario actual), riguroso mandato de no dormir toda la noche, sino todos en vela (Ixtozoztli), que quiere decir todos en vela o alerta”. Los zapotecas del istmo de Tehuantepec, a quienes La Conquista española no alcanzó porque salieron del Valle de Oaxaca, conservaron esta tradición que en Juchitán y sus cercanías adoptaron como nombres como: “Vela de la Ciruela”, “El Camote”, “El Lagarto”. Con la imposición de la religión católica, consecuencia de La Conquista, se incorporaron al calendario indígena los motivos del santoral religioso. De esta manera sustituyeron la Vela del Maíz por la de San Isidro Labrador, la de La Lluvia por la de San Juan, y la mayor de ellas, la del patrón de Juchitán, San Vicente Ferrer, al inicio de la primavera. Los cultos originales que mantenían los indígenas a la naturaleza y a sus deidades se transformaron en festejos religiosos católicos, no obstante, la cultura zapoteca incorporó su cosmovisión e idiosincrasia y así se han mantenido estas galas.
NTX/ACC/VLU