Presupuesto capitalino debe diseñarse con enfoque de igualdad

México, 10 Nov (Notimex).- El Consejo para Prevenir y Eliminar la Discriminación de la Ciudad de México difundió los principios rectores en materia de igualdad y no discriminación que deben observarse en el diseño e implementación del presupuesto público. El objetivo es promover presupuestos públicos con perspectiva de igualdad y no discriminación a partir de la idea de que sin asignaciones presupuestarias suficientes y eficaces, en términos de derechos, no es posible aspirar a sociedades más justas e igualitarias. Los lineamientos, publicados este viernes en la Gaceta Oficial, son de carácter obligatorio para todos los entes, dependencias o instituciones de la administración pública de la Ciudad de México y deberán ser tomadas en cuenta en la elaboración y aplicación del presupuesto. El organismo destacó la importancia de la forma de administrar y gestionar los recursos públicos, ya que a través de éstos que se podrán dar las condiciones para compensar las desigualdades sociales que aún persisten. Resaltó que un enfoque del presupuesto basado en los derechos exige que esas decisiones se adopten con arreglo a principios de transparencia, rendición de cuentas, máximo uso de recursos disponibles, realización progresiva de los derechos y no retroceso, así como no discriminación y participación. Entre los principios que se deben observar destacan la universalidad, integridad e inalienabilidad, indivisibilidad e interdependencia, progresividad, participación ciudadana y empoderamiento, transparencia y rendición de cuentas y prohibición de regresión y máximo uso de recursos disponible. De igual manera, recordó que el derecho internacional de las garantías individuales incorpora normas y principios que resultan aplicables al presupuesto y contribuyen a determinar el contenido de las obligaciones estatales en relación con el cumplimiento de los derechos económicos, sociales y culturales En ese sentido, refirió que un presupuesto con perspectiva de derechos humanos debe reflejar políticas públicas con dicha perspectiva a lo largo de todo el ciclo presupuestario y permitir identificar la distribución de recursos bajo principios de derechos humanos a través de indicadores de gestión y de una estructura presupuestaria con información desagregada. Así como permitir monitorear el avance en la realización de los derechos humanos a través de indicadores de resultados y de impacto con una estructura presupuestaria orientada a resultados.