Por Alejandro Montesinos Castillo
Washington, 4 Jun (Notimex).- La Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) presentó hoy el Informe sobre la situación de los Derechos Humanos en Cuba durante 2019, destacando que su elaboración se realizó a través de entrevistas a ciudadanos, presos políticos, organizaciones civiles e investigaciones periodísticas.
El órgano autónomo de la Organización de los Estados Americanos (OEA) señaló que no se pudo visitar el país para integrar este informe, por lo que se buscó información oficial, de difícil acceso y con muchos datos desactualizados.
A través de una conferencia virtual, la CIDH abordó la situación de los derechos humanos en Cuba y destacó tres aspectos fundamentales: la situación general en la isla, la libertad de expresión y los derechos económicos, sociales, culturales y ambientales.
Antonia Urrejuela, vicepresidenta de la CIDH, mencionó que aunque Cuba no forma parte de los Estados miembros de la OEA, ni ha firmado los acuerdos por los derechos humanos, la CIDH ha continuando con el seguimiento a la situación del país, pues considera que el embargo estadounidense no exime al gobierno de respetar estos derechos.
El gobierno de Cuba ha referido en más de una ocasión que no viola los derechos humanos de ninguna persona. Según argumenta, su sistema de valores se enfoca más en garantizar derechos como el acceso universal a la salud, alimentación, deportes y educación.
Durante su participación, Urrejuela subrayó que la nueva constitución del país, aprobada en 2019, tiene elementos positivos para el ejercicio pleno de los derechos de la población, pues se garantiza el derecho a la vida, se prohíbe la discriminación de minorías y personas en situación de vulnerabilidad, además de que hay indicios que muestran una clara disminución del hambre y la desnutrición.
Pese a ello, alertó que el documento se posiciona por encima de los tratos internacionales y no garantiza elementos importantes como la libertad de expresión y pensamiento, pues los condiciona a la filiación política; asimismo, lamentó que en la Carta Magna del país aún se mantega la pena de muerte.
Por su parte, el comisionado de la CIDH Stuardo Ralón alertó que el gobierno cubano ha prohibido en más de una ocasión que activistas salgan del país, como una forma de evitar que se hable de la situación de los derechos humanos en foros internacionales.
Asimismo, denunció que aún existe un monopolio del Estado sobre los medios de comunicación, lo que ha perpetuado la persecución selectiva de medios y periodistas independientes.
Ralón señaló que no hay información clara sobre las personas privadas de su libertad en la isla, aunque sí hay múltiples denuncias de las “condiciones deplorables” de los centros de reclusión.
Al respecto, Christopher Hernández-Roy, asesor del secretario general de la OEA, destacó que actualmente hay 130 presos políticos en Cuba, así como represión a por lo menos 30 actores políticos y a 260 periodistas independientes, en el contexto de la pandemia de COVID-19.
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