*En activo o retiradas, algunas de las grandes estrellas de la mejor etapa de la cinematografía nacional continúan entre nosotros
Por Ulises Rodríguez Eleuterio
México, 4 Jun (Notimex).- La cinematografía nacional tuvo un periodo en el que se conjugaron varios factores para que México se convirtiera en el centro de las mejores producciones comerciales de Latinoamérica y de habla hispana.
Desde mediados de la década de los años 30, hasta inicios de los años 60, nuestro país fue referente de una industria cinematrográfica sólida y rentable pues los conflictos políticos y económicos entre las potencias de Europa y Estados Unidos, previos a la Segunda Guerra Mundial, y el conflicto mismo, influyeron de manera determinante para que productores, guionistas, fotógrafos, compositores, inversionistas y por supuesto actores, tanto mexicanos, como extranjeros refugiados, encontraran en nuestro país el lugar ideal para hacer lo que sabían hacer: cine.
Dicha etapa conocida como la Época de Oro del Cine Mexicano sigue presente hoy día gracias a la retransmisión de decenas de películas que si bien, dejan en segundo plano a todos aquellos talentos que participaron en cada producción detrás de cámaras, se han vuelto emblemas dentro de la cultura y la identidad mexicanas gracias a esa gran camada de actores, que con sus interpretaciones de villanos y heroínas, charros y rumberas, pachucos y revolucionarios, siguen siendo recordados, queridos y considerados referentes de actuación, no sólo en tierra azteca, sino en muchos países hispanoparlantes.
Aunque con los años estrellas como Pedro Infante, Dolores del Río, María Félix y Jorge Negrete, por mencionar a los más conocidos, han fallecido, actualmente sobreviven algunos grandes histriones de dicha era de gloria para las producciones fílmicas en México.
Queta Lavat
Enriqueta Margarita Lavat Bayona, nacida el 23 de febrero de 1929, es hoy en día una de las pocas estrellas de la Época de Oro del Cine Mexicano que continúa en activo, tan solo el año pasado tuvo una participación especial en la telenovela Cita a ciegas y en la serie Esta historia me suena.
Queta debutó a los 13 años en ¡Así se quiere en Jalisco! (1942), al lado de Jorge Negrete, cinta con la que, sin proponérselo, hizo historia pues fue la primera película mexicana en ser filmada a color. A lo largo de casi ocho décadas, Lavat ha participado en un centenar de películas al lado de actores de la talla de Pedro Infante, Irma Dorantes y Silvia Pinal.
En cuanto a la televisión, durante sus 74 años en activo, ha logrado colocar su nombre en 41 telenovelas y siete series de televisión, además de que en 2017 regresó al teatro con la obra Conversaciones con mamá.
Su trayectoria no ha pasado desapercibida, no obstante, sólo ha ganado un premio en su trayectoria: el ACE, en 1992, a Mejor Coactuación Femenina por la telenovela Ángeles blancos; lo que sí ha logrado coleccionar son diversos premios especiales a su trayectoria, en los que se incluyen una Diosa de plata, un premio Forjadores de la Industria y un Ariel de Oro, entre otros.
Durante 2019, a la edad de 90 años, el Festival Internacional de Cine de Guanajuato le otorgó un reconocimiento en el Homenaje a Mujeres en el Cine y la Televisión por 73 años de carrera ininterrumpida.
“Nunca he parado, bueno, unas temporadas muy cortitas para tener a mis hijos. Lo más gratificante son estos reconocimientos, son muy bellos, se llevan en el corazón. He tenido muchas satisfacciones, premios y éxitos; el mejor es que me sigan llamando para seguir trabajando”, dijo a los medios de comunicación al finalizar la ceremonia.
El más reciente trabajo de Queta Lavat tuvo lugar en la nueva versión de la telenovela La usurpadora de 2019, en el que interpretó a “Doña Piedad Mejía vda. de Bernal”, actuación que le valió una nominación a los premios TVyNovelas como Mejor Primera Actriz.
Elsa Aguirre
Elsa Irma Aguirre Juárez, originaria de la capital del Estado de Chihuahua, nació el 25 de septiembre de 1930, es una de las actrices más reconocidas de la Época de Oro del Cine Mexicano, actualmente retirada, así como también una de las mujeres más bellas del mundo.
Su carrera comenzó de manera “circunstancial”, según ella refiere, pues todo inició tras ganar un certamen de belleza con apenas 14 años. Ya instalada en la Ciudad de México, fue invitada a participar en la cinta El sexo fuerte bajo la dirección de Emilio Gómez Muriel, filme de trascendencia en el cine mexicano debido a que fue una de las pioneras en el género de ciencia ficción.
Aunque se retiró de los sets de filmación luego de concluir su segunda película debido a los comentarios que su madre recibía al respecto, Aguirre volvió como protagonista gracias al director Julio Bracho, quien la buscó en su casa del barrio de Mixcoac, para que que compartiera el primer crédito con Joaquín Pardavé en la cinta Don Simón de Lira, en 1946; a la que le siguieron trabajos notables como el coprotagónico en Cuidado con el amor, de 1954, al lado de Pedro Infante.
Partícipe de 41 cintas, una de ellas de producción hollywoodense (Giant, de 1965), así como de cinco producciones televisivas y contadas incursiones en el teatro, Aguirre vio su retiro, no declarado, durante la década de 1990, aunque se mantuvo activa hasta principios del nuevo milenio.
Además de su carrera como intérprete, Elsa es reconocida por abrazar el veganismo y el yoga, disciplinas que, además de contribuir a la conservación de su belleza, la han llevado a participar de conferencias tanto a nivel nacional como internacional, sobre alimentación ovolactovegetariana, yoga e incluso sobre sus secretos de belleza.
Actualmente vive sola en Acapulco, desde donde se mantiene en contacto con su familia, además de haber declarado recientemente a una revista de espectáculos, que no considera aún la posibilidad de vivir en La Casa del Actor, incluso ahora que se vive la pandemia por coronavirus.
“Yo estoy aquí en Acapulco, no me ha pegado tan duro porque estoy acostumbrada a vivir sola y me siento bien, me estoy cuidando, tengo la dicha de tener un bonito paisaje, el cielo y el mar, doy gracias”, aseguró.
Rosa de Castilla
María Victoria Ledesma Cuevas, mejor conocida como Rosa de Castilla, actriz y cantante originaria de Jalisco, comenzó su carrera en la música a los 14 años en Aguascalientes, en el centro nocturno Río Rosa; sin embargo, fue durante las años 1959 y 1960 que se consagró en el cine nacional al lado de intérpretes como Pedro Armendáriz, Miguel Aceves Mejía, Antonio Aguilar y Fernando Casanova.
Fue en 1951, ya instalada en la Ciudad de México y con gran popularidad gracias al espectáculo que presentaba en el centro nocturno Waikikí, el productor Raúl de Anda la invita a participar en los filmes El lobo solitario, La justicia del lobo y Vuelve el lobo, al lado de Dagoberto Rodríguez y Flor Silvestre.
50 largometrajes, cuatro álbumes de estudio, una nominación al Ariel en 1954 y un Premio Bravo, la reafirman como una de las divas de la Época de Oro del Cine Mexicano, y aunque su última cinta fue La paloma de Marsella, de 1999, Rosa tuvo una participación especial en 2015 en el videoclip de Vámonos del cantante Zarco Gómez.
Actualmente, se encuentra retirada de los reflectores, vive en La Casa del Actor, no sin antes haber fungido como miembro del comité de honor y justicia de la Asociación Nacional de Actores.
Alma Rosa Aguirre
Junto con su hermana Elsa, Alma Rosa Aguirre también hizo una carrera en la cinematografía nacional. Nacida el 19 de febrero de 1929, Alma Rosa ganó, junto a su hermana Elsa, un certamen de belleza que luego las llevaría a debutar en El sexo fuerte, de 1945.
Con una carrera menos extensa en relación a la de su hermana menor, en cuanto a la cantidad de largometrajes filmados (31), Alma logró alternar en el cine con histriones como Joaquín Pardavé, Manolo Fábregas, Luis Aguilar y Sara García, por mencionar algunos. En televisión hizo lo propio en producciones en las que alternó actuaciones y participaciones con Vicente Fernández y Angélica María, entre otros histriones.
Hoy en día Alma Rosa Aguirre vive en La Casa del Actor, retirada del medio desde hace varias décadas; sin embargo, no lamenta haber concluido con su carrera, pues para ella, el cine “fue como un sueño”.
Armando Silvestre
Armando Silvestre Carrascosa, es un actor mexicano que inició su carrera durante la Época de Oro del Cine Mexicano, aunque es más reconocido por convertirse en una de las máximas figuras en el cine de acción, y logró destacar en Hollywood.
Nacido el 6 de enero de 1926 en Tijuana, Baja California, su primer trabajo cinematográfico se remonta a 1945, cuando debuta con un papel secundario en La casa colorada de Miguel Morayta.
Su primer protagónico llegaría dos años más tarde en la película de Matilde Landeta Lola Casanova, al lado de Meche Barba. Para 1951 debuta en la meca del cine con Wyoming Mail, a la que siguieron Apache Drums y Mark of the Renegade, desde entonces compagina su carrera entre México y Estados Unidos.
Pedro Infante, Ninón Sevilla, Elsa Aguirre y Silvia Pinal, son algunas de las personalidades de la cinematografía mexicana con las que compartió créditos. Gracias a su físico bien trabajado es que Silvestre es convocado para participar en el género de acción y posteriormente en el de luchadores.
También incursionó en la televisión estadounidense, siendo su trabajo más notable su actuación en la serie La mujer maravilla, serie protagonizada por Lynda Carter. Es durante la década de 1980 que el cine de acción decae, por lo cual acepta trabajar en el género de ficheras al lado de Sasha Montenegro, quien se convertiría en una de sus más grandes amigas.
En el año 2010, Armando Silvestre recibe, de manos de Montenegro, una Diosa de Plata especial en reconocimiento a su trayectoria; y para 2011 realiza su última incursión en la gran pantalla con La hija de Moctezuma, al lado de María Elena Velasco “La India María”.
Su últimos trabajos importantes en la pantalla se dieron en la teleserie La impostora de 2014 y Despertar contigo, aunque, a sus 94 años, hace apariciones esporádicas en telenovelas en Estados Unidos, donde radica actualmente.
Christiane Martel
De ascendencia italiana y francesa, pero nacida en Francia, Christiane Martel fue la segunda Miss Universo en la historia del certamen, lo que la impulsó a probar suerte en la actuación, carrera que comenzó en Hollywood con la cinta So this Is Paris” de 1954.
Un año más tarde vino a radicar a México, paraincorporarse rápidamente al elenco de Abajo el telón, al lado del comediante Mario Moreno “Cantinflas”, y aunque su carrera fue breve, pues se retiró a mediados de la década de 1960, dejó como legado 32 filmes entre México, Estados Unidos e Italia.
En la actualidad Martel se desenvuelve en diversas obras filantrópicas en el país, además de haber sido jurado en el concurso que la vio nacer como estrella, en sus ediciones 1978 y 2007. Está casada con el empresario Miguel Alemán Velasco, quien también fungió como presidente de la División de Noticias, Informativos y DHT de Televisa, y quien además ha desempeñdo varios cargos en la administración pública mexicana, el más notable como gobernador de Veracruz en dos periodos.
En 2018 le fue otorgada una Diosa de Plata especial, en reconocimiento a su trayectoria, donde recordó su debut en el cine nacional con Abajo el telón: “Cantinflas me hablaba en inglés y yo no le entendía, me decía que iba a trabajar en su película y hacerlo fue muy agradable. Por cierto esta cinta la pasaron por televisión y a mi nieto Paco le gusta mucho y como yo no hablaba bien español, le causa mucha risa”, dijo durante su momento frente al micrófono.
María Victoria
De nombre María Victoria Cervantes, la actriz de 87 años es reconocida por su personaje insignia “Inocencia Escarabarzaleta Dávalos Pandeada”, interpretado en la película y posterior serie de televisión La criada bien criada, además de haber incursionado en varias cintas de la Época de Oro del cine mexicano.
Su debut llegó con la cinta de 1942 Canto de las Américas, al lado de Adriana Lamar y Ramón Pereda a la que se suman títulos como Amor perdido, Solamente una vez, Cucurrucucú paloma y Las noches del Blanquita.
Con 37 largometrajes en su carrera, y 16 participaciones en televisión, ya sea en telenovelas o unitarios, María Victoria es considerada no solo una representante de la Época de Oro del Cine Mexicano, sino una figura dentro de la cultura popular en México, es por eso que en 2002 se levantó un monumento con su figura a las afueras del Teatro Blanquita, con la que, además, conmemoraba 52 años de trayectoria.
Como es de esperarse, María Victoria posee una Diosa de Plata especial, entregada en 2006, la cual rinde homenaje a su trayectoria; además de una primera estatuilla a la que se hizo acreedora por su protagónico en Sor Metiche de 1981; asimismo, en 2009 le fue entregado un Califa de Oro, nuevamente por su extensa carrera bajo los reflectores.
En la actualidad María Victoria vive al sur de la Ciudad de México, y aunque entre sus costumbres se encontraba salir los domingos a comer con sus hijos Rubén y Teté, debido a la contingencia sanitaria, ha tenido que mantenerse alejada de sus seres queridos.
“Ha sido horrible, horrible, ya nada más se la pasa uno en misas y rosarios para que nos oiga Dios y que ya pare tanta maldad. Desde que tengo uso de razón, nunca había visto una temporada así tan fea. Da miedo”, afirmó recientemente en una entrevista televisiva.
Las anteriores son sólo unas cuantas de las celebridades que hoy en día permanecen como leyendas de la cinematografía nacional, rostros conocidos mundialmente, que le dieron una proyección, que no ha podido ser replicada, a las producciones fílmicas de México.
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