Niamey, 4 Jun (Notimex).- Miles de personas provenientes de Mali han huido del campo de refugiados que se encuentra en el oeste de Níger, luego de un ataque armado por parte de un comando el lunes pasado.
En el ataque, ingresaron 50 combatientes en motocicletas, mataron a tres líderes locales, secuestraron a un guardia, destruyeron antenas de comunicación y sabotearon el suministro de agua en un ataque coordinado el lunes en Intikane cerca de la frontera con Malí.
El campo es el lugar de residencia de 20 mil refugiados de Mali y 15 mil nigerianos desplazados por la guerra interna, que huyen de la violencia.
Hasta el momento, alrededor de 3 mil personas han huido, informó Al Jazeera.
La Agencia de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) informó hoy que se están evaluando los daños y tratando de restablecer el sistema de agua.
Durante el ataque del lunes, los perpetradores cortaron las líneas de comunicación y destruyeron las fuentes de agua potable. Después de algunas horas, el gobierno desplegó tropas para asegurar el área.
Aunque no se ha confirmado, los principales sospechosos son los grupos yihadistas vinculados con al-Qaeda e ISIS, que han realizado cada vez más ataques, principalmente en Mali.
La violencia ha llegado sobre todo a Mali y a Burkina Faso, pero también ha ocasionado problemas en Níger, que comparte fronteras largas y porosas con ambos países.
En Níger se encuentran casi 60 mil refugiados provenientes de Mali que han huido de su país desde 2012 cuando se intensificaron los ataques de al-Qaeda.
Níger, por su parte, es atacado por Boko Haram y su escisión, el Estado Islámico en la Provincia de África Occidental, grupos islamistas que se oponen a la occidentalización de la región.
En enero, el enviado de la ONU para África Occidental dijo al Consejo de Seguridad de la ONU que los ataques se han multiplicado por cinco en Burkina Faso, Malí y Níger desde 2016, con más de 4 mil muertes reportadas en 2019.
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