Ciudad de México enfrenta retos para aspirar a ser un “paraíso peatonal”

Por Nelly Segura Granados México, 17 May (Notimex).- El titular de la Autoridad del Espacio Público (AEP) en la Ciudad de México, Roberto Remes Tello de Meneses, reconoció que no existe un plan formal para peatonalizar las calles de la capital del país. En entrevista para Notimex, afirmó que esta situación deberá de ser incluida en un plan maestro del espacio público, toda vez que tampoco existe un conteo real de las calles peatonales, lo que representa un reto. Explicó que las calles peatonales son aquellas que permiten que los transeúntes puedan ir distraídos sin temor de ser lesionados por un auto; señaló que en la capital del país existen calles como Presidente Masaryk, Corregidora, Génova y Bruselas que tienen esas características. “Son calles para que los conductores estén mucho más alertas, tienen la posibilidad de que transiten también bicicletas y sobre todo permiten que el peatón predomine”, enfatizó. También existen otras calles que se encuentran cerradas al tránsito vehicular como Francisco I. Madero, de la que aseguró “comunica mucho la esencia de la Ciudad de México”, toda vez que en ella confluyen la arquitectura desde edificios como la Torre Latinoamericana y el templo de La Profesa. Afirmó que calles como Madero son muestra que con la peatonalización se gana seguridad y beneficios al comercio, además de mejorar la imagen de la Ciudad. En el marco de su primer aniversario al frente de la AEP, consideró que la peatonalización en calles de colonias que no son tan conocidas permitiría el turismo barrial, lo que podría potenciar la economía local. Ejemplificó el caso de Pontevedra, España, que ha tenido una reducción de ciento por ciento en las muertes ocasionadas por atropellamientos, ya que en dicho lugar únicamente se permite transitar en automóvil a una velocidad máxima de 30 kilómetros por hora. La Ciudad de México, enfatizó, tendría que aspirar a esas cifras en zonas como el Centro Histórico, el centro de Coyoacán, San Ángel, el centro de Tlalpan y lugares que por su naturaleza permiten que el tránsito sea parsimonioso. Reconoció que existen retos como en el caso de la calle 5 de Mayo en el Centro Histórico o bien las calles Centenario, Aguayo y Felipe Carrillo Puerto en Coyoacán, que “deberían tener un diseño más relajado para los transeúntes”. “Lo más justo para los peatones es que puedan disfrutar de la ciudad de una manera tranquila sin preocuparse por los automóviles”, afirmó el también creador del concepto Rey Peatón, que promueve y rescata la caminata como medio de transporte válido, necesario y sostenible. Los ciudadanos, aseveró, tienen que salir de los centros comerciales a los que equiparó con una caverna en la que es imposible conocer la ciudad a través de los sentidos. Explicó que en la capital del país “hay muchos centros comerciales y seguramente habrá más”, por lo que propuso que su diseño permita que las tiendas salgan a las calles para que confluyan con el entorno. En su opinión, proyectos como el Centros de Transferencia Modal (Cetram) de Chapultepec permiten la convivencia del paradero del transporte público, la estación del Metro y locales comerciales, lo que permite la interacción con las calles de la ciudad. En contraparte, señaló que lugares como Santa Fe "odian a los peatones” toda vez que es imposible llegar a pie o en bicicleta”; por lo que son zonas que tendrán que ser conquistadas paulatinamente por los peatones con la ampliación de banquetas y la creación de infraestructura. Detalló también que existen calles que tienen la oportunidad de ser peatonales al tener tránsito local y banquetas amplías, sin embargo, permanecen cerradas con rejas puestas por los vecinos. Delegaciones como Iztapalapa, Iztacalco, Coyoacán, Xochimilco, Tlalpan Magdalena Contreras, Cuajimalpa y Gustavo A Madero tienen la posibilidad de peatonalizar sus barrios con trabajo social y de convencimiento, lo que requiere la convicción de conductores y transeúntes. Lo anterior, con el objetivo de convertir a la ciudad en un “paraíso peatonal”, en el que la movilidad de los automovilistas no tenga que ser prioritaria sobre la de los peatones con una lógica de convivencia. “Tenemos que empoderar a los peatones para que se avergüence aquel que eche lámina en las zonas que no son para automovilistas”, detalló. Reconoció que actualmente existe una lucha por el poder en las calles, por lo que la sociedad tendrá que encontrar una solución que tendrá que ser vertical con leyes que, por ejemplo, castiguen por 72 horas -como en el caso del alcoholímetro- a aquellos que superen la velocidad permitida. O bien encontrar una alternativa que permita crear infraestructura en la que confluyan el automóvil, el transporte público, las bicicletas y los peatones. El funcionario indicó que el esfuerzo primario debe estar en la modificación de la cultura de la movilidad: velocidades bajas, aplicación de sanciones, respeto entre las personas y preferencia del peatón. Asimismo, detalló que la infraestructura debe mejorar mediante esfuerzos sistemáticos, tanto para corregir fallas como ampliar espacios, lo que se tiene que convertir en política pública. Remes Tello de Meneses también propuso crear una infraestructura vehicular subterránea que conecte con los estacionamientos que ya existen en los grandes edificios que se encuentran en el margen de Periférico, por ejemplo. De esta manera, sostuvo, los autos podrían liberar el tránsito a nivel de calle y con ello aumentar los espacios peatonales, proyecto que tendría un gasto que tendría que ser sufragado por la inversión privada y por los automovilistas que deseen tener mayor comodidad y menos tránsito. “En una competencia por el espacio siempre habrá un ganador y un perdedor, actualmente el peatón es el ganador porque cada vez cuenta con mayor infraestructura”, aunque admitió que lo ideal sería una estructura que incluya a ambas partes. Destacó que actualmente se habla mucho de movilidad sustentable, sin embargo, no se está aterrizando el tema, por lo que planteó la posibilidad de inculcar a los jóvenes de secundaria y preparatoria el uso de la bicicleta urbana. Con ello, opinó, los jóvenes se podrían mover en sus colonias en un medio de transporte sustentable, “lo que permitirá generar un arraigo en el uso de la bicicleta por lo menos en tramos cortos”. Además, se podría incrementar el número de traslados en bicicleta e incrementar el uso de las ciclovías disponibles y pasar de 1.0 a 10 por ciento del número de viajes que se realizan todos los días en la ciudad. Aclaró que aunque el tema de la movilidad de bicicleta depende de las secretarias del Medio Ambiente (Sedema) y de Movilidad (Semovi), desde su punto de vista la Ciudad de México tiene una infraestructura creada a partir de 2005, lo que permitirá que en el futuro más personas utilicen la bicicleta. Ahora existe la ciclovía de Paseo de la Reforma, la de Eje 3 Oriente, la que se encuentra en calles de la colonia Condesa, Chapultepec, Patriotismo, Revolución y la de Periférico, aunque reconoció que esta última carece las especificaciones ideales. Según Roberto Remes, sistemas como Ecobici incrementan el uso de la bicicleta, sin embargo, no son accesibles para todos los niveles de la población por requerir tarjeta de crédito, aunque reconoció que es una marca que promueve el uso de la bicicleta. Respecto al proyecto Rey Peatón, afirmó que por el momento no se dedica a él toda vez que podría derivar en un conflicto de intereses por ser un funcionario público, sin embargo, continua en diversas organizaciones que lo han utilizado como una filosofía.